
8 Ventajas de comprar un piso de obra nueva sobre plano

Comprar una casa es una de las decisiones más importantes que se pueden tomar en la vida y es crucial sentir que hacemos la mejor elección. Si te encuentras en búsqueda de tu nuevo hogar te recomendamos que sigas leyendo, porque te daremos las claves de por qué comprar un piso de obra nueva sobre plano es realmente una buena decisión.
¿Qué es la venta sobre plano?
Comprar un piso de obra nueva quiere decir que, normalmente, vas a adquirir una vivienda que no está construida todavía, donde inicialmente sólo se podrá ver la ubicación de la vivienda, el plano con la distribución de ésta y una muestra de las calidades de los acabados.
Cada vez más, las propiedades de nueva construcción no solo son más comunes, sino que también más deseadas por los compradores. Y no es de extrañar, porque ofrecen numerosas ventajas que las viviendas de segunda mano no tienen.
Y lo más importante: estrenas una casa más moderna, con una distribución más funcional, acabados de calidad y diseño y consigues un ahorro de gastos en suministros gracias a una mayor eficiencia energética.
Principales ventajas:
Mejores condiciones de pago
La mayor ventaja de la compra sobre plano es el tiempo del que se dispone para pagar el la entrada y posteriormente solicitar la hipoteca. Es decir, no es necesario desembolsar el importe total de la entrada de la vivienda (normalmente el 20%) y los gastos (un 10% adicional), sino que se abonará mediante recibos durante la fase de construcción (18-20 meses). Al finalizar la obra se procede a la firma de la escritura y la contratación de la hipoteca para pagar el 80% restante.
Mayor eficiencia energética
Las casas antiguas no solo cuentan con sistemas de energía menos eficientes, sino que también suelen estar construidas con materiales que pueden haberse deteriorado con el tiempo. Esto genera no solamente un incremento en las facturas de suministros, sino que también contribuyen a la contaminación ambiental de las ciudades.
Los pisos de obra nueva son respetuosos con el medio ambiente, porque tal y como establece la ley, deben disponer del certificado energético que informa de la eficiencia del edificio, especialmente en términos de climatización. Esto se traduce en un ahorro de la factura energética, mayor confort en tu hogar, revalorización de tu vivienda y lo más importante: contribuyes a generar un impacto positivo y verde en la sociedad.
Menos mantenimiento
Todo se deteriora con el tiempo, y tu casa también lo hará. Obviamente, cuantas más cosas se deterioren en una casa, más gastarás en mantenimiento. Por eso, una bonita casa antigua, puede ser también un agujero negro de gastos. Es el caso, por ejemplo, de un sistema antiguo de tuberías, algo tremendamente problemático y muy costoso en su reparación.
Con un piso de nueva construcción, sin embargo, todo es nuevo, lo que significa que requerirá muy poco gasto en mantenimiento y muchos menos dolores de cabeza.
Inversión segura
Comprar una casa de obra nueva es una inversión que vas a rentabilizar en el futuro, ya sea a través del alquiler con unos ingresos regulares, o poniéndola en venta, gracias a la revalorización del activo con el paso del tiempo.
Eliges la opción que se adapta a tus necesidades
Pisos en planta, bajos o áticos, con los dormitorios que necesites, 1 o 2 plazas de garaje, trastero, zonas comunes, terrazas… Las promociones de obra nueva tienen en cuenta las necesidades de vivienda actuales, por eso se diseñan edificios con distribuciones funcionales y distintas tipologías, de tal forma que puedes encontrar lo que más encaje con tus gustos y presupuesto sin renunciar a la ubicación y resto de servicios que te ofrece la promoción.

Más servicios y prestaciones
Otra de las ventajas de la obra nueva residencial es la cantidad de servicios que ofrecen, siempre innovando para adaptarse a las necesidades que surgen entre sus futuros propietarios: urbanizaciones modernas con zonas comunes como áreas verdes, parques infantiles, piscina, pista de pádel, salas gourmet, áreas de estudio o teletrabajo… sin olvidarnos de elementos que nos resuelven el día a día como el trastero y la plaza de garaje..
Y la vida puede resultar mucho más agradable disfrutando de tu tiempo libre en espectaculares zonas comunes, ¿no crees?
Eres el primero en vivir allí
Cuando compras una casa de nueva construcción, eres la primera persona en estrenar la propiedad. Puedes poner tu sello en ella, ser el primero en crear recuerdos allí y, lo que es más importante, no tienes que lidiar con nada que los propietarios anteriores hayan dejado atrás.
Crear un hogar desde cero y por primera vez es sin duda una experiencia inolvidable que merecerá la pena ser vivida.
Garantías ante defectos
Las casas de obra nueva están protegidas por la garantía del constructor durante un periodo de tiempo determinado. Esto ofrece la seguridad de que, si surge algún problema durante ese tiempo, podrás reclamar. Algo que, por supuesto, no ocurre con las viviendas de segunda mano, donde la reparación de cualquier tipo de desperfecto correrá por tu cuenta.
Existen tres tipos de garantía: una de un año de duración, que cubre los fallos de terminación o acabados; otra que dura tres años y ofrece protección sobre las instalaciones y la garantía de estructura, que se ejecuta a través del seguro decenal y protege durante diez años contra los daños materiales causados en el edificio por defectos que afecten los elementos estructurales del edificio.